
El día de la visibilidad lésbica se celebra cada 26 de abril, para reivindicar la igualdad de derechos y oportunidades para las lesbianas. Y es que las lesbianas sufrimos una doble discriminación, por ser mujeres y por ser lesbianas y, incluso dentro de los colectivos LGTBI, nuestra voz ha sido relegada a un segundo plano
Los hombres cis gays tienen el privilegio que les otorga el patriarcado para tener voz en el espacio público y, de este modo, son la cara visible. Las mujeres lesbianas no somos igual de visibles, no salimos en los programas de televisión, ni en las campañas de salud sexual, ni se nos ve en ningún ámbito de la vida pública, de forma que tampoco tenemos referentes.
Se nos cuestiona continuamente y tenemos que escuchar comentarios lesbófobos que hacen referencia a nuestra sexualidad, a nuestra apariencia o expresión de género, y comentarios machistas que nos quieren denigrar por el hecho de ser mujeres.
Según datos de la Agencia de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, el 44% de las lesbianas europeas dicen haber sufrido conductas o comentarios despectivos en sus empresas por su condición sexual, entre otros datos más que nos indican que las mujeres lesbianas estamos expuestas a la doble discriminación que ya hemos referido: por ser mujeres y por nuestra condición de lesbianas.
Es por eso que es fundamental no solo luchar por nuestros derechos, sino además visibilizar y normalizar una elección vital creando referentes para aquellas que no se atreven a salir del armario.
Para poner nuestro granito de arena, además de este post, os recomendamos el documental “Lesbofòbia. Un documental i deu respostes” de Creación Positiva, donde se recogen diez testimonios que visibilizan las violencias machistas hacia las lesbianas y buscan estrategias para acabar con la lesbofóbia. Otra propuesta es el cómic “Chicazo” de Susana Martín, sobre la lesbofóbia y el empoderamiento